Wednesday, January 25, 2012

Economía y matrimonio "moderno"

Adaptación de la Columna de Freakonomics blog "Economics and Open Marriage" del 24 de enero de 2012

La vida matrimonial ha cambiado drásticamente durante el último siglo. Ahora podemos controlar la fertilidad; las mujeres tienen expectativas de ingresar al mercado laboral; las tareas domésticas han sido alteradas dramáticamente por la tecnología; y las costumbres sexuales son distintas. Sin embargo, la mayoría de las parejas firman un contrato nupcial prácticamente idéntico al que firmaron sus abuelos (sin considerar el divorcio que Chile incorporó hace poco, siendo el último país del mundo en hacerlo).
En nuestras relaciones laborales y románticas, vivimos bajo el imperio del libre albedrío: cualquier parte puede abandonar la relación si no les funciona. Pero en  nuestras relaciones de empleo negociamos términos individuales y particulares con nuestros jefes, regateando por sueldos, beneficios, horarios, tareas y días de vacaciones. Este contrato personal te permite definir la relación que mejor funciona para ti y tu empleador. Deberíamos tener el mismo enfoque para la vida marital.
El matrimonio se puede fortalecer personalizando contratos nupciales que enfaticen los elementos que son esenciales para hacer funcionar cada relación. ¿Es el "hasta que la muerte nos separe" indispensable? ¿Qué tal repartir las labores domésticas? ¿Vivir cerca de unos padres u otros o ninguno? ¿Quién se queda en casa sin trabajar si se enferman los hijos? ¿Gastar o ahorrar? ¿Jubilar anticipado o postergado? ¿Cuántos hijos? ¿Cómo repartiremos el tiempo entre trabajo, familia, amigos y cada uno?
Todas estas interrogantes están en el centro de la vida en común pero sólo una - la fidelidad - está en el contrato de matrimonio.
¿Porqué siguen las personas firmando prácticamente el mismo acuerdo que sus abuelos?
Tal vez estamos entrampados en un mal equilibrio, en el que las parejas temen sugerir un contrato distinto que puede ser interpretado como de mala fe. Imagínate sugerirle a tu novio o novia que estás tan empecinado en evitar un divorcio que, aunque tratarás de ser infaliblemente fiel, tú crees que la infidelidad no debiera ser considerado un pecado capital. El problema es que tu pareja inferirá que quieres flexibilidad en el compromiso porque planeas serle infiel. Y sin darte cuenta, se cancela la boda. Mejor no "hacer olitas".
El resultado es que muchas parejas terminan acordando el mismo centenario contrato que apenas ha cambiado, aunque el matrimonio si lo ha hecho.
Cómo debiera ser este contrato matrimonial personalizado?
Para algunos, reparto igualitario de las labores domésticas; para otros, privilegiar carreras sobre familia; y para otros "picados de la araña", antes de decir "si, acepto" es sabio tener una seria discusión sobre la importancia de la fidelidad sexual.

Tuesday, January 17, 2012

AS9: Competidor Monopolístico

Alexis está confirmando en las canchas del viejo mundo, todos los pronósticos que su talento vaticinaban. Su registro goleador lo ubica como el 3er mejor debutante de la historia del cuadro catalán. Sin la lesión y los 2 meses de para, talvez sería el mejor ¿Impresionante no? Si miramos su carrera desde el prisma deportivo, ciertamente lo es.
Pero lo que me interesa en este análisis es cómo el uso de sus destrezas únicas conduce a un resultado económico tan deslumbrante como el otro.
Si analizamos lo que AS9 ha obtenido en ingresos, sólo por jugar fútbol (actualmente recibe E$3 millones al año), y proyectamos los que recibirá hasta que se retire, digamos, a los 32 años, llegamos a concluir que el tocopillano recaudará cerca de 1.000.000 de UF o $22.300 millones de pesos. El valor presente de esos flujos hasta su cumpleaños 33 es de 450.000 UF aproximadamente (descontados a una tasa de 8%/año). Unos $10.000 millones de pesos de hoy. Linda cifra.
Para calcular lo que Sánchez sacrificó para obtener esos beneficios tenemos que identificar la opción que tenía. Supongamos que nunca tuvo la oportunidad de probarse en un equipo de fútbol y optó por ser profesor de educación física; actividad que desarrollará hasta su jubilación a los 65 años a un sueldo promedio de mercado para esa profesión. El valor presente de todos los ingresos que percibirá, descontados a la misma tasa del caso anterior es de cerca de 4.500 UF, 99 millones de pesos.
Entonces, si el retorno que tuvo por sacrificar 99 millones fue de 10.000 millones, la rentabilidad de haber tomado la opción de usar sus habilidades en la cancha fue de un...10.000% en el periodo!!! Similares cifras se obtienen si lo comparamos con los ingresos de un futbolista promedio.
Ahora, si comparamos esa rentabilidad con la de una industria normal que renta un aceptable 10% al año, aun la opción de Alexis es un 100% superior.
Todo esto para concluir lo siguiente: a pesar de que Alexis Sánchez es un futbolista como muchos (tiene competencia), él hace uso intensivo de un atributo que lo diferencia de los demás (su pericia y potencia) para obtener utilidades superiores que la media del mercado.
Esto en economía se llama Competencia Monopolística y es un tipo de competencia imperfecta en los mercados en los cuales un productor de un bien o servicio obtiene utilidades superiores al resto por dotar a su producto de un atributo único. Esto le permite ejercer un poder de mercado cobrando un precio distinto al resto, sin verse afectado por las reacciones de los otros participantes. En el corto plazo puede actuar como monopolio.
Esto también justifica las estrategias corporativas de nicho o diferenciación, tan exitosas en mercados ultra competitivos.
Muchos pueden jugar profesionalmente al fútbol, sólo uno puede ser Alexis Sánchez.