Tuesday, April 22, 2014

Economía cotidiana: diversoderecha

La diversificación es una estrategia corporativa que consiste en aumentar las ventas (o miembros o adeptos) de la organización mediante el desarrollo de nuevos productos para nuevos consumidores. Esta se puede lograr agregando frescos atributos a algún producto existente para hacerlo más atractivo a personas que antes compraban o adherían a la competencia. Mientras más diferenciada sea la oferta de una organización, ya sea un bien o un servicio, más opción habrá de encantar a algún nicho de consumidores nuevo. Sobretodo si esos nuevos atributos están hechos especialmente para ese nicho.
Es precisamente lo que hizo la centroizquierda hace algunos años atrás. De los partidos históricos de la Concertación: DC, PPD, Radicales y Socialistas han proliferado CH1, PRI, MAS, IC, etc. Además "han llevado a su molino" a todo movimiento social de los últimos 4 años: pinguinos, universitarios, mapuches, ayseninos, calameños, gays, etc. Todos muy similares ideológicamente, pero con atributos diferenciadores notorios: ideas, causas, discursos, promesas, rostros. En la elección recién pasada, incluso insertaron al PC. Diversificación perfecta. Resultado a 6 o 7 años de iniciado este proceso: el respaldo electoral histórico para la Nueva Mayoría que ya todos conocemos.
En la vereda del frente, qué hizo la centroderecha: exactamente lo contrario. Ha mantenido por un cuarto de siglo los mismos referentes (RN y UDI), idénticos rostros en primera línea, testarudamente aferrada a algunos hitos conservadores y desalineada con emergentes demandas ciudadanas. Más aún, cercenaron de su coalición a CH1, la única iniciativa renovadora del sector, apenas llegados al gobierno.
¿Entonces, es buena la iniciativa de Amplitud y Evopoli de crear nuevos movimientos políticos? Claro que sí, en la medida que se identifiquen con nuevas ideas, rostros y causas (liberales) que representen a votantes esquivos. Claro que no, si son "más de lo mismo". 
Para consolidar esta estrategia es pésima señal denostarla, como hacen algunos próceres, cobrándole sentimientos cochinos a los que decidieron formar una nueva propuesta desde el mismo sector. Si en vez de acuchillarse por los medios, los adeptos de la Alianza se deciden a avanzar con esta simple y probada estrategia, que tantos dividendos le ha dado a la Concertación, puede que encuentren el millón y medio de votos que andan buscando.

Economía cotidiana: Estudiar y trabajar

Futuros universitarios y técnicos: Durante los próximos 45 días tomarán la heroica decisión de "¿Qué estudiar?". Para unos será fácil, para otros incierto; otros lo tienen decidido hace meses, algunos lo harán a última hora. Pero la resolución va mucho más allá creo. El foco no debiera estar solo en qué carrera elegir sino también en preguntarse "¿en qué quiero trabajar?". 
Con la diversificación de carreras, planes de estudio y especializaciones disponibles, hay varias maneras de llegar a estar calificado para desempeñar un trabajo determinado. Es común hoy encontrar publicistas en puestos de gerencia de marketing, psicólogos en gestión de recursos humanos o chefs dueños de cadenas de restaurantes. Es recomendable que barajen varias alternativas antes de decidir. No solo una en distintas instituciones de educación superior.
Sin embargo, hay algo que no ha cambiado: para tener éxito en el desempeño profesional, no basta con el título profesional o técnico (y no lo han internalizado). Atención!: a la teoría del título hay que agregarle las oportunidades de una buena red de contactos; la experiencia laboral (en cualquier función) y la solidez de una especialización continua. 
La buena noticia es que no es necesario que esperen a terminar su carrera para avanzar en estos 3 objetivos. 
Para los primeros 2, no dejen pasar oportunidades de trabajo. En lo que sea, aunque no tenga relación con su futura profesión. Relaciónense con jefes, clientes, usuarios, colegas. Anoten nombres, teléfonos y cargos. Más de alguno les podrá ayudar cuando empiecen a insertarse en el mercado laboral de su profesión una vez titulados. El que tenga que decidir su contratación bien puede ser a quien atendieron en un restaurante o encuestaron en una calle céntrica. 
Aprendan no solo de su función, de la que tienen otros también. Si pueden, de la de sus jefes. Traten de detectar oportunidades de mejora y propónganlas. Estén disponibles para distintas tareas (prohibido rechazar tareas con el argumento "a mi no me contrataron para eso"). En todos los curriculum vitae que presenten en su vida deberán detallar experiencia y un inicio precoz y diverso siempre es bien recibido.  
Por último, no rechacen capacitarse. El hecho de estar estudiando no impide que agreguen otras competencias transversales. Un cursillo excel, de atención al cliente, manejo de stress o similar siempre hace bien y va a sumar a la hora de buscar trabajo